Muchas mujeres desean lucir, en estas celebraciones, una piel hermosa,
joven y sana.
Para ello, compran productos de belleza, en ocasiones, excesivamente
caros sin saber que en su casa, especialmente en la cocina, pueden encontrar la
solución para tener un cutis envidiable.
Existen diferentes mascarillas caseras que pueden ser elaborarse con
frutas y verduras que no sólo realzan la belleza sino hasta nutren e hidratan
la piel.
MASCARILLA PARA PIEL SECA
Este tipo de cutis tiene una textura muy fina y poros pequeños con
tendencia a provocar una sensación de tirantez especialmente después de lavar
el rostro.
Mascarilla de aguacate.
Cortar un aguacate, extraer la pulpa y
aplastarla hasta conseguir una masa cremosa.
Agregar unas gotas de aceite de oliva virgen. Aplicar sobre el rostro y
cuello directamente. Dejar actuar durante 30 minutos y pasado ese tiempo, eliminar
con agua tibia.
Mascarilla de yogur y miel
. Mezclar en un recipiente pequeño tres
cucharadas de yogur natural, una yema de huevo y media cucharadita de miel.
Mezclar hasta formar una masa consistente y
extender sobre la piel de la cara, cuello y hombros. Dejar actuar
durante 30 minutos y después retirar la mascarilla con abundante agua tibia.
Máscara de espinaca:
Remojar unas hojas de espinaca en leche entera que
esté hirviendo. Cuando esta preparación esté tibia, envolverla en una gasa y
aplicar sobre el rostro.
Mascarilla hidratante de huevo y miel.
Mezclar media cucharadita de
miel y la yema de un huevo, hasta formar una masa. Aplicarla sobre la piel de
la cara, cuello y hombros y dejar actuar durante 20 minutos. Retirar con
abundante agua tibia.
Estetipo de cutis tiene un aspecto brillante y graso aunque esté recién
lavada. Es muy propensa a tener poros dilatados, puntos negros y acné.
Mascarilla de avena.
Cocer tres cucharadas de harina integral de avena.
Filtrar el líquido resultante y poner sobre el rostro. Esperar media hora antes de eliminar con agua
tibia.
Mascarilla de levadura de cerveza.
Mezclar dos cucharaditas de levadura
en polvo con un poco de agua caliente hasta obtener una pasta y luego mezclar con
un huevo entero.
Mascarilla de tomate.
Aplicar
varias rodajas de un tomate mediano sobre el rostro. Dejar puesto por 15 minutos. Retirar con agua fresca.
Mascarilla de fresas.
Aplastar
con un tenedor 7 fresas maduras hasta obtener una masa consistente y luego
añadir 1 clara de huevo batida. Mezclar todo y colocar sobre el rostro.
Retirar, mediante un algodón empapado con agua tibia y luego fría, la
mascarilla cuando ya esté seca.
Este tipo de piel presenta un área llamada “zona T” (nariz, mentón y frente) donde hay
pequeños puntos negros y grasa mientras que el resto del rostro es seco.
Mascarilla de limón y aguacate.
Aplastar la pulpa de un aguacate y
combinarla con la clara de un huevo a punto de nieve. Mezclar hasta lograr una
masa consistente y, luego, agregar una cucharada de zumo de limón. Esta
mascarilla permite eliminar la grasa del rostro.
Mascarilla de albaricoque
Colocar en una batidora un albaricoque
mediano maduro y batir hasta obtener una masa consistente. Aplicar directamente sobre el rostro durante
20 minutos. Pasado ese tiempo, aclarar
con agua tibia.
Mascarilla de miel.
Preparar la miel al baño María añadiendo, antes de
aplicarla sobre la cara, un poco de agua caliente. Extender sobre la cara
mediante masajes circulares.
PARA CUTIS DESIDRATADOS, IRRITADOS ,ENVEJECIDOS Y MANCHADOS
La piel con estas características tiene una tonalidad mate y un aspecto
apagado y gris. Además, produce sensación de sequedad y es muy propensa a
arrugarse y mancharse con facilidad.
Mascarilla de plátano y avena.
Pelar un plátano pequeño muy maduro y
machacarlo hasta formar una masa. Verter sobre ésta una cucharadita de miel y
una cucharada de harina de avena. Mezclar con un tenedor hasta formar una pasta
homogénea y aplicar la pasta sobre la piel formando círculos. Dejar actuar durante 15 minutos y eliminar
con la ayuda de agua tibia.
Mascarilla de melocotón
Colocar en una batidora un melocotón mediano
maduro y batir hasta obtener una masa consistente. Luego, mezclar con la yema de un huevo y
aplicar directamente sobre el rostro durante 20 minutos. Pasado ese tiempo, aclarar con agua tibia.
Mascarillas de uvas y cerezas
Aplastar con un tenedor cinco uvas verdes
y cinco cerezas hasta logra una masa consistente. Mezclar con 3 cucharadas de avena y 3
cucharadas de leche entera. Aplicar sobre el rostro y retirar después de 15
minutos. Esta mascarillas combate las
arrugas provocadas por la gesticulación.
Mascarilla de frambuesas
Elaborar una mascarilla con 25 g de frambuesas majadas, una cucharada de
yogur natural y otra de harina cebada.
Mezclar y aplicar sobre el rostro durante diez minutos. Retirar con agua fresca.
Mascarilla de germen de trigo
Añadir cuatro cucharadas de germen de trigo en una decocción de
zanahorias. Extender ésta sobre la cara
bien limpia durante aproximadamente veinte minutos. Esta mascarilla
proporcionará elasticidad a la piel.
Mascarilla de miel y oliva
Preparar una mascarilla casera mezclando, a partes iguales, miel de
abeja, suero fisiológico y aceite de oliva. Con la cara recién lavada, aplicar
la mascarilla durante 20 minutos. Retirar con abundante agua tibia. Por último,
aclarar en frío para fortalecer los músculos del rostro.
Sumergir espinacas hervidas en leche y trituradas posteriormente.
Aplicar sobre el rostro después de dilatar los poros con el vapor de una
infusión de tomillo, romero o salvia.